Los autobuses y camiones aceleran mientras los vehículos FCEV chinos aceleran

China está tomando rápida y silenciosamente el control del mercado de pilas de combustible de hidrógeno, y la actividad del mercado durante el año pasado eclipsó la del resto del mundo. Si bien el país se esfuerza por ponerse al día con las tecnologías de electrolizadores, podría dominar los sectores del lado de la demanda en las economías del hidrógeno, si los competidores internacionales no logran acelerar su ritmo.

A lo largo de 2021, la producción de vehículos de pila de combustible de hidrógeno en China aumentó un 48% hasta las 1.777 unidades. Alrededor del 35% de esto se logró en diciembre, según los últimos datos publicados por la Asociación Automovilística de China.

Pero la verdadera cifra principal es la capacidad de producción, que se quintuplicó durante el año, incluso a pesar de las estrictas medidas de bloqueo en muchas provincias del país. Desde una capacidad de 8.000 unidades por año a principios de 2021, los cinco principales fabricantes de pilas de combustible han ampliado su capacidad de producción, y su capacidad anual acumulada supera ahora las 45.000 unidades.

Sinohytec ha ampliado su capacidad inicial de 2.000 unidades en Beijing a 10.000 unidades. Shanghai REFIRE cuenta ahora con dos instalaciones de 5.000 unidades en funcionamiento en las provincias de Guangdong y Tianjin, habiendo tenido anteriormente una capacidad de producción total de sólo 2.000 unidades. Sinosynergy amplió sus instalaciones de 2.000 unidades en Guangdong a 5.000 unidades.

Jiangsu Horizon experimentó el mayor crecimiento anual, con sus instalaciones de 1.000 unidades en Guangdong que ahora tienen una producción potencial combinada de 10.000 unidades al año. Nowogen y Zhejiang HydroT Tech también inauguraron sus primeras instalaciones a gran escala, con capacidades de producción de 2.000 unidades y 5.000 unidades respectivamente.

Parte de la iniciativa se produce antes de la promesa de China de celebrar unos Juegos Olímpicos de Invierno "neutrales en carbono" a finales de este año, con un enfoque clave puesto en el transporte público basado en hidrógeno. Esta semana, la Corporación de Transporte Público de Beijing anunció que utilizará 212 autobuses de hidrógeno en Beijing durante los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022, como parte de 11.000 vehículos de nueva energía para los juegos. La ciudad coanfitriona de Zhangjiakou también cuenta ya con 444 autobuses de pila de combustible en funcionamiento.

En total, Beijing planea tener 10.000 vehículos de pila de combustible en sus carreteras para 2025, atendidos por 74 estaciones de servicio. Ha pronosticado que su uso de hidrógeno para el transporte por carretera y la generación de energía alcanzará las 50 toneladas diarias en 2023 y las 135 toneladas en 2025. Entre 2021 y 2025, se espera que unos 4.400 camiones pasen a pilas de combustible, desplazando 145.000 toneladas de consumo de diésel al año. , según un informe del gobierno. Para 2030, el gobierno chino quiere tener un millón de vehículos de pila de combustible en sus carreteras.

De hecho, China ya ha establecido silenciosamente una participación líder en el mercado de vehículos de pila de combustible. De los 5.000 autobuses de pila de combustible que funcionan en todo el mundo, alrededor de 3.300 se han instalado sólo en China, por delante de Europa (alrededor de 1.300) y América del Norte (menos de 100).

Junto a ello, a lo largo de 2021, China también duplicó su número de estaciones de repostaje de hidrógeno. Encabezadas por las provincias de Jiangsu (20) y Shandong (11), Guangdong (10) y Beijing, un total de 100 nuevas estaciones entraron en funcionamiento a lo largo del año, lo que eleva el número total en todo el país a 218.

La refinería de petróleo más grande del país, Sinopec, también ha mejorado recientemente sus planes de hidrógeno verde, con una instalación de electrolizadores de 20.000 toneladas por año que entrará en funcionamiento en 2023, además de firmar un acuerdo con Cummins para una gigafábrica de electrolizadores en la provincia del sur. de Guangdong a partir de 2028. También prevé construir 1.000 estaciones de servicio de aquí a 2025.

Se estima que en China se han firmado más de 400 políticas en los últimos dos años, por parte de gobiernos centrales o locales, para apoyar el desarrollo temprano de la economía del hidrógeno del país. La atención se centró inicialmente en los vehículos de pila de combustible, incluido un subsidio a nivel nacional para su despliegue.

La última versión de esto, efectiva entre 2020 y 2023, tiene como objetivo promover los vehículos de pila de combustible de hidrógeno en los grupos de ciudades de Beijing, Shanghai y Guangdong Foshan, con subsidios de 240 millones de dólares durante el período.

Los vehículos pequeños fueron subsidiados por el gobierno por una suma de 39.000 dólares cada uno. Los camiones ligeros y los vehículos comerciales que pesen menos de 12 toneladas recibirán un subsidio estándar de 33.000 dólares, y las unidades más grandes, incluidos los autobuses grandes, recibirán 58.000 dólares. Los subsidios cayeron al 92% de su nivel original en 2021 y se ubicarán en el 85% de su nivel original este año. En 2023, volverán a caer hasta el 69% de esta cifra. Sin embargo, los componentes de alto rendimiento, como las pilas de pilas de combustible, pueden justificar algún subsidio adicional, si lo otorga un comité de expertos del gobierno local del grupo de ciudades.

Dado que este entorno de subsidios incentiva los vehículos de pila de combustible a gran escala y de alto rendimiento, no sorprende que los autobuses y estaciones de servicio de hidrógeno experimentaran un repunte hasta 2021.

Se observó un crecimiento similar en el segmento de camiones de pila de combustible de China, con empresas como Sky-well, Foshan Feichi y Dayun, todas aumentando sus carteras de pedidos para competir con fabricantes de equipos originales occidentales como Nikola y Hyzon Motors. El trío entregó 142 camiones FCEV al mercado chino en 2020.

Beiqi Foton Motor, con sede en Beijing, dijo en septiembre que espera vender 4.000 vehículos de hidrógeno para 2023 y 15.000 de este tipo para 2025, mientras que el fabricante extranjero Hyundai ha firmado dos cartas de intención con empresas chinas para suministrar un total de 4.000 camiones de pila de combustible a China para 2025.